viernes, 12 de septiembre de 2014

Perfectamente imperfecta



 


“- Yo es que todavía no sé qué se pide en esta oposición.
- ¿Cómo que no?
- No, no, porque sí, yo estudio pero ¿qué piden?¿qué quieren?
-La perfección”

Esta conversación la tuve hace un par de semanas con otro opositor. Parece una pregunta super fácil de responder ¿qué piden?¿qué buscan para aprobarte? Pero si te pones a pensarlo no es algo tan obvio. Yo le contesté que buscaban la perfección, pero a pesar de la rotundidad de la palabra y lo dura que es, realmente fue como no contestar. Porque ¿qué es la perfección?.

La perfección para mi tiene 2 componentes fundamentales:

El primero de ellos es pura y estrictamente teórico (de codos y capacidad): saberse de pe a pa los artículos, los nombres de los doctos en la materia y sus teorías, el nº y fecha de jurisprudencia relevante, el tipo de norma con su número, fecha y título…

Y otro más formal: ser claro al exponer el tema, hablar ligero pero sin atropellar las palabras, mantener la compostura durante la exposición, ser capaz de mirar a los ojos al prepa, gesticular un poco con las manos, cambios de tono para no adormecer al oyente…

Partamos de la siguiente base: el opositor perfecto NO existe, y si lo hay o bien es una excepción o bien miente como un bellaco (en ambos casos hay que pasar olímpicamente de que existen porque la regla general es la media, no la excepción).

El opositor se mueve siempre en la cuerda floja de buscar incansablemente esa perfección y ser consciente de que no la alcanzará porque es humano y por tanto imperfecto. Cruzar la línea hacia un lado supone el grave riesgo de perder la cabeza porque “nunca sea suficiente” y hacia el otro es subir el tipo de interés de nuestra particular hipoteca, porque “total si es que nunca voy a hacerlo perfecto”.  

Hay que jugar con nuestra fuerza de voluntad, convencerse de que hay que mejorar y superarse porque lo cierto es que no estamos solos y que nuestro sueño lo comparten otras personas que también se están dejando los cuernos por lograrlo. Pero por otro lado, darse tregua, considerar los fallos como nuevas metas que superar y no hundirse por ser imperfectos.

Una frase: “Que cada uno dé de si todo lo mejor que pueda dar” S. Pedro Poveda.
Una peli: Cisne negro.

7 comentarios:

  1. Me encanta tu blog porque llegas a mostrar realmente como eres y me encanta! Nunca te visto pero tengo la sensación de conocerte un poquito.... Asi que lo primero gracias por compartirlo con todos!! Pareces tan sensible... Y te veo tan entregada que estoy segura de que lo vas a conseguir! Esta claro que la perfección no existe, pero las particularidades y características de cada uno están en la imperfección. Aprendes muchísimo más de un mal cante que de hacerlo perfecto siempre! Y los errores que cometes en el prepa seguro que en el examen no te pasan... Yo personalmente prefiero ser imperfecta e ir superandome y perfeccionadome hacia mi propia imperfección (jajajjaja no tiene mucho sentido pero yo me comprendo...) te mando un abrazo muy muy grande! Por cierto has visto la peli del cisne negro? Ami no me gustó nada!!! De hecho la abandoné a la mitad.. Jajaja

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    1. Hola!! gracias por tus halagos (me pones colorada cual tomate)!! Conozco a un opositor superdotado (demostrado, nada de fanfarroneo) y el otro día le pregunté si había tenido alguna vez algún mal cante. Me dijo que 3 veces contadas y por cómo lo dijo y cómo derivó después la conversación, me di cuenta de que para él casi no suponía un reto el memorizar.

      El primer momento, como todo hijo de vecino, me dio muchíiisima envidia saber que podía trabajar y estudiar, salir, tener novia....en fin, ser "persona" y opositor. Sin embargo, luego me dio casi hasta lástima, porque de verdad él quería que le supusiera un reto, para poder sentir esa autosatisfacción de conseguir algo que te parece imposible o simplemente porque por ese esfuerzo extra tu y tu personalidad os ponéis al límite.

      Así que sí, estoy contigo e indudablemente prefiero ser imperfecta o sino al menos que cada vez que rozo con la punta del dedo la perfección sienta que toda la felicidad del mundo está dentro de mi porque el esfuerzo ha valido la pena.

      PD: me encantó el cisne negro, creo que refleja muy bien el lado "malo" de la perfección, de llevarte al límite. Te faltó ver el final para captar el sentido, aunque para gustos colores. Un besote y buena semana!

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  2. Yo la verdad es que en mis inicios fui a ver los exámenes orales que estaban haciendo, y pude ver a una chica que se quedo en blanco y 2 muy interesantes: el primero porque se acercaba bastante a lo que tu defines como opositor perfecto, buen contenido y exposición clara, fluida, con convencimiento... vamos, lo que a todos nos gustaria (sacó notaza claro), y luego a una chica que me sirvió de mucho: ella no aprobó pero empezó tímida y temblorosa y según iba hacia adelante se fue creciendo y mejorando, lo que me enseñó que hay que intentarlo SIEMPRE. Así que cada uno tenemos nuestros puntos positivos y negativos y debemos aprender de nuestros errores para seguir mejorando. Ánimo!

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    1. No lo podría haber dicho mejor, cada uno con sus pros y sus contras, que todos tenemos de todo! A caminar, a aguantar el chaparrón, aprender a tapar los "agujeros" del paraguas y a cruzar los dedos para que todo salga bien. Un beso!

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  3. Hola opositora. Acabo de descubrir tu blog y ne ha encantado. Hoy no es fácil encontrar a alguien que redacte tan bien. La única crítica: resulta pesimista en general. Yo estudio AE desde hace un año y no encuentro un sistema de estudio=rápidez+calidad. Tampoco cumplo con el cronómetro por falta de fluidez. ¿Podrías comentar tu método? Muchas gracias y más ánimos.

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    1. Hola anonimo futuro AE! Lo primero ¡caray menuda elección! Date por satisfecho por haber aguantado el primer año, es duro a más no poder en cualquier oposición y más imagino en la tuya.

      Sobre el sistema de estudio...cada persona es un mundo. Yo estuve 3 años largos siguiendo el "común". Es decir, llevar el número de temas que se exige a cualquier precio. Y digo a cualquier precio porque en mi caso consistió en falta absoluta de literalidad y de precisión terminológica. Lo cual, como puede imaginar, en la última convocatoria supuso mi suspenso automático.

      Así que sí, llevo no llega a un año dándole al nuevo sistema. Primando ante todo la literalidad y precisión. Sin importar el número de temas por cante (dentro de lo razonable siempre). Así he notado un graaaan cambio, a mejor sin duda.

      El sistema no tiene truco. Estudiar palabra por palabra cada tema, no solo el articulado, sino también la doctrina. Eso me permite meter más contenido (dado que lo tengo "automatizado") en el mismo tiempo, y además con la ventaja de ser precisa. Es un método muy lento pero que a día de hoy me está ayudando a mejorar. Pero ¡ojo! digo a mejorar, no necesariamente a aprobar. Sigo sin saber si el nivel que estoy alcanzando es suficiente para conseguirlo.

      Siento no descubrirte la pólvora. Solo paciencia, esfuerzo y constancia :)

      PD: gracias por tus bonitas palabras hacia mi prosa. Sobre lo pesimista...en parte tienes razón, sobre todo las entradas de los dos últimos años. Han sido muy movidos en lo personal y en la opo. Desde luego me gustaría transmitir más ánimo, y pondré de mi parte para que así sea. Infinita gratitud por tenerte por aquí.

      Escribeme cuando gustes! Un beso

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  4. Hola opositora. Acabo de descubrir tu blog y ne ha encantado. Hoy no es fácil encontrar a alguien que redacte tan bien. La única crítica: resulta pesimista en general. Yo estudio AE desde hace un año y no encuentro un sistema de estudio=rápidez+calidad. Tampoco cumplo con el cronómetro por falta de fluidez. ¿Podrías comentar tu método? Muchas gracias y más ánimos.

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