jueves, 8 de diciembre de 2016

Black Friday: el simulacro

En toda nave nodriza siempre hay un sistema de comunicación para saber lo que pasa en la otra punta de la nave y en el exterior. En la mía, las noticias buenas y malas, van precedidas de un "brrrr brrrrrrr brrrrrrrr" y una luz parpadeante, y en esta ocasión no iba a ser distinto. 

Un mensaje al grupo de preparación (la sonrisa que se me había dibujado se convirtió en un rictus, algo debía pasar). Era sábado, y en sábado el grupo siempre está en calma. Algo gordo debía pasar. El Capitán mandaba instrucciones "Atención atención. El próximo viernes la tripulación se reunirá para simulacro de batalla final. Repito. Simulacro el viernes. Todos a las 15 en el lugar habitual".

Y de pronto...en ese grupo la calmachicha se convirtió en ojo de huracán. La órbita de los planetas se desplazó y nos miraba directamente a nosotros con un ¿y ahora qué?¿cómo debe continuar la historia de la astronomía? Y los tripulantes, nosotros, enmudecimos, y aunque en una pantalla no se puede distinguir si el silencio es vacuo o sustancial, entonces si que lo supimos. Nuestros dedos quisieron marcar un "mayday mayday" donde realmente solo nos atrevismos a poner un simple "ok".

La instrucción estaba dada, sin opción de reproche. Un simulacro colectivo. Pero la pregunta era ¿cómo afrontar la semana? era momento de poner en práctica alguna de las enseñanzas de estos meses (no hacer especial un cante, meter la cabeza en mi nevera cada vez que fuera necesario, confiar en mi....) 

Y así pasaron los días, con las tareas que toda nave requiere, hasta que nos plantamos en nuestro peculiar Black Friday (¿casualidad? no lo creo). Muchos acontencimientos históricos han pasado en Viernes, y han acabado pasando a los anales de la Historia como Black Friday. Puede que el nuestro diera para una nueva entrada en Wiki, que sería recordado en lo sucesivo.

Así, los tripulantes enfundados en nuestros mejores trajes de astronauta, salimos al exterior de la nave, al vacío. Parece mentira cómo el sitio en el que te desenvuelves cotidianamente puede variar según la situación en la que te encuentres. Ese espacio cientos de veces paseado, parecía completamente ajeno. 

Una vez hechas las respectivas preguntas, el Capitán avisó de una última regla: el orden de llamada sería aleatorio. ¡Menuda sorpresita, mi capitán! Pero una vez más, justo como hacía 7 días, nuestras voces quisieron alzarse pero no salió mas que un mudo "de acuerdo". 

Fueron sucediéndose los llamamientos, uno detrás de otro, arduas batallas libraron los tripulantes, unos con tics, otros con tembleques iniciales y unos pocos muy solventemente. Mientras tanto, traté de seguir sus batallas, tratando de rememorar y analizar si lo hubiera hecho igual o no. Cuando, como si de un derecho de abolorio se tratara, me llamaron en la penúltima oportunidad, la sexta.

Cogí todos los cachivaches que se nos permite a los de mi rango, me bajé la visera y apunté. La batalla comenzaba y para mi sorpresa, pese a que a lo que me enfrentaba era completamente nuevo, fui superando los ligeros fallos que los nervios te hacen cometer. El pánico escénico inicial, de saber que los otros tripulantes andaban tomando nota de mis fallos y mis aciertos, supuso algún tembleque, pero conseguí superarlo con una respiración profunda en una fracción de segundo. Me puse en mi sitio, seguí y terminé.

El Capitán estuvo orgulloso, y superamos el simulacro. 

"Un pequeño paso para el tripulante, un gran paso para la nave espacial " 
(era así ¿no? :-p)

¡Lo conseguiremos!

6 comentarios:

  1. Tu tienes que escribir un libro!! Escribes fenomenal y tienes una imaginación fantástica, te lo digo de verdad, tienes que hacerlo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! jajaja gracias! Pues lo publiqué y no me acababa de convencer, si tuviera más tiempo, un par de vueltas más y niquelao. Gracias por pasarte y por tus palabras!

      Eliminar
  2. ¡Me has tenido en vilo toda la historia! Jajaja, nunca un simulacro fue contado de forma tan guay

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! jajaja si?!! Me alegro!! ojalá los simulacros fueran tan guays jajaja, vueltecita a la estratosfera mediante! Un beso y ánimo con la semana!

      Eliminar
  3. Lo cierto es que escribes muy bien, se ve que te gusta, no dejes de hacerlo. Muchas felicidades por el blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Johnny! Gracias por tus palabras y tus ánimos! Mientras las musas no se vayan lo seguiré haciendo!

      PD: no me resisto a preguntar si el nombre viene por el músico o por Pocahontas :P

      Eliminar