jueves, 27 de diciembre de 2018

¿Y ahora qué?

Mis deberes
Cuando estaba en plena faena, fuera el momento que fuera, me traía un poco al pairo que me preguntaran 200 veces cuándo salía la convocatoria, si me había examinado, si no es que llevaba mucho tiempo ya preparando...Sencillamente porque sabía hacia dónde iba o al menos, hacia dónde quería ir.

Sin embargo este tiempo en que (sigo) sin saber qué me pide el corazón (porque el cuerpo lo que me pide es volver a nacer para preferir la media antes que los sueños personales) la pregunta que me irrita y en algunas ocasiones me saca de mis casillas es "bueno, ¿y ahora qué?". Probablemente me molesta tanto porque yo misma no paro de machacarme con ella. Me levanto y ahí está, me voy a por el pan y ahí me encuentra, estoy fregando y aparece. ¿Y ahora qué?. Pues sigo sin saberlo.

Hay días en que me levanto y digo, mira, me paso a otras oposiciones, serán unos "x" temas más y total, estudiar ya sé. Pero entonces entra el bucle: "pero no sabes si serás capaz de enfrentarte a un tribunal y a lo mejor tu problema es ese", "ufff...solo pensar en volverme a pasar ¿1?¿2 años? más con esta vida", "y si no apruebas volverás a las mismas, pero con más años y con menos opciones". 

Y otras mañanas me levanto pensando que haré el master, que aprenderé cómo se ejerce y me lanzaré a la piscina. Pero entonces empiezan las cábalas en el otro sentido: "¿máster online o presencial?Porque si es presencial hasta finales de 2019 no empiezan pfff...", "¿y si no soy capaz?¿y si me pasa como con la oposición que lo veo de primeras todo bien y al final me vuelvo a estampar contra mis límites?", "¿y si no soy capaz de ganar para vivir?".

Cuando pienso en seguir opositando, a veces me da la sensación de que me agarro a lo que "conozco" por miedo al "ahí fuera"; y cuando pienso en el ejercicio privado, acabo pensando que lo hago por despecho (una amiga me dijo que hablaba de la oposición como si aún fuera mi novio, así que lo de despecho encaja bastante bien).

Pienso que trabajar me devuelve algo que la oposición no te da -o al menos a mi no me ha dado- que son éxitos, un poco de aire; pero por otro lado, todo lo que sé, el dominio de los temas, se irá evaporando y más lejos estaré de ser servidora pública.

Sigo echa un lío, como véis. Así que sí, cuando me preguntan el "¿Y ahora qué?" se me queda cara de besugo, balbuceo y me escaqueo con un "estoy de vacaciones, después de Reyes, veremos", pero por dentro, mientras lo digo como si no pasara nada, estoy cagada de miedo, porque sé que llegarán Reyes, seguiré sin saber pero con la obligación autoimpuesta de tener que tomar una decisión. 

Espero no desanimar a nadie con esta parte de mi historia, que quién sabe, a lo mejor tiene un final feliz. De hecho, en el fondo sé que la tendrá, pero probablemente mucho más tarde de lo que a mi me gustaría.

2 comentarios:

  1. Yo conozco a un chico que hizo tus opo y se pasó después a las de seguridad social y está en la gloria.Aveces menos es más.

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    1. Si, conozco varios casos. Pero mi cabeza me pedía una cambio de disco o de vida, realmente. Me da lástima porque poco a poco iré perdiendo todo lo que sé...pero bueno, soy de las que piensa que tu te haces tu plan pero hay que dejar que la vida moldee.

      Mucho ánimo.

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